DEBORAS A LAS NACIONES 2011
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El ministerio DEBORA A LAS NACIONES 2011,
Nació del corazón de Una Sierva de Dios y hoy en día esta en la RED, Para compartir a las Naciones las Ricas y Bellas Bendiciones que
Dios le a provisto a Ella.
D I O S L E S B E N D I G A M U J E R E S
INTERSESORAS Y GUERRERAS
DEL DIOS ALTISIMO
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LA COMUNION CON DIOS PADRE
DIOS HIJO Y DIOS ESPIRITU SANTO
ES VITAL IMPORTANCIA PARA MI VIDA
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“La oración
que prevalece
y el bautismo
del Espíritu Santo”
La Palabra de Dios nos enseña en Santiago 5:16: “La oración eficaz del justo puede mucho”.
A veces estamos año tras año en la iglesia, pero no sabemos orar. Si el cristiano adolece de una oración efectiva y bíblica va a enfrentar muchos problemas. Muchos cristianos viven vidas de derrota, opresión, depresión, tristeza, enfermedad, miseria, pobreza, ruina, falta de paz y comunión con Dios, porque no llevan una vida de oración efectiva. No es solamente orar o el tiempo que se ora, ya que no es sólo importante hablar con Dios sino cómo es que hablamos con Dios.
Si una persona habla mucho con Dios, pero no está hablando de acuerdo a lo que Dios demanda, en realidad no está hablando con nadie. El idioma de Dios es Su Palabra, y por esto es importante que usted hable Su idioma. Si lo que usted está diciendo no está en el idioma de Dios, entonces su oración no está basada en la Palabra y por ende, no tiene fundamento bíblico porque no está de acuerdo a la voluntad de Dios. Ésta es una de las razones del por qué las oraciones de muchos cristianos no son contestadas.
La oración es una de las armas espirituales más importantes en la vida de un cristiano. Una iglesia que sabe orar en línea con la Palabra de Dios es una iglesia llena de Dios. La oración hace que el poder de Dios se manifieste plenamente. La oración que hacemos no cambia a Dios, pero sí nos cambia a nosotros y a las circunstancias que nos rodean.
1. DEFINICIÓN DEL TÉRMINO ORACIÓN
a. El diccionario Vines define el término “oración” como: cualquier comunión espiritual con Dios; hacer petición a Dios o hablar con Dios.
b. La palabra griega EUCHOMAI significa, orar a Dios (II Corintios 13:7).
c. La palabra griega PROSEUCHOMAI tiene que ver con el cómo debemos orar al Padre” (Romanos 8:26).
d. La palabra griega EROATO también significa, pedir o hacer petición.
Éstas son las tres palabras más comunes del griego que se emplean cuando se refiere a pedir, interceder, hacer ruegos, hacer peticiones, o hablar u orar a Dios.
2. CÓMO DEBEMOS ORAR
Debes entender que cuando tú estás orando te estás comunicando con Dios y debes tener plena confianza que no hay diablo que pueda impedirlo. El diablo siempre va a tratar de impedir que tu oración llegue como lo hizo muchas veces en el Antiguo Testamento. Lo lamentable para el diablo es que bajo el Nuevo Testamento nosotros tenemos al Espíritu Santo dentro de nosotros y las oraciones que hacemos en fe son tomadas por el Espíritu Santo y llevadas al Padre y no hay diablo ni demonio que pueda impedirlo.
a. Oramos al Padre
Cuando oramos nos estamos dirigiendo al Padre según Mateo 6:6; Juan 16:23. Oramos al Padre en el nombre de Jesús conforme a Efesios 1:17, 3:14 y I Pedro 4:11. Oramos conforme a la Palabra de Dios, no conforme a nuestras emociones.
a. Oramos en el nombre de Jesús
Oramos al Padre en el nombre de Jesús y no en el nombre de María, de San Pablo ni de San Judas Tadeo. La escritura nos enseña a orar en el nombre de Jesús y no en ningún otro nombre (Juan 16:23-24; 14; 13; I Juan 5:14-15). Cristo mismo enseñó que para orar había que hacerlo en el nombre de Jesús. Cuando usted ora al Padre en el nombre de Jesús, Él contesta su oración y el Padre es glorificado. Dios desea ser glorificado en todo tiempo. Si usted hace petición a Dios, está más que dispuesto en responderle su oración en el nombre de Jesús, porque Él recibe toda la Gloria.
b. Oramos de acuerdo a la Palabra de Dios
La piedra angular de la oración es orar conforme a la Palabra de Dios. Si tu oración no está en línea con la Palabra de Dios, entonces tu oración no es efectiva. Pertenecemos al Trono de Dios (Efesios 2:6) y por eso, no debemos presentarnos ante Dios con una actitud religiosa, de mediocridad, de derrota, de miseria o de fracaso, porque Dios detesta ese tipo de actitud.
Dios nos sacó del fracaso, de la miseria, de la pobreza y de la ruina y nos hizo para Él reyes, señores y sacerdotes. La Biblia dice que Él es Rey de reyes y Señor de señores. Un rey es uno que tiene autoridad. Él es Sumo Sacerdote o Pontífice y nos hizo sacerdotes.
Cristo es llamado nuestro Gran Sumo Pontífice. La palabra Pontífice significa puente, mediador, del griego MESITES que significa fiador. Él es el único puente entre Dios y los hombres. Somos puentes santos de Dios conforme a Hebreos 7:22.
Dios se apresura a poner su Palabra por obra. Cuando tú le estás orando a Dios y le hablas de su Palabra, Él se apresura a contestarla (Jeremías 1:12). Su Palabra es la voluntad de Dios. Yo tengo que creer lo que dice su Palabra. Si su Palabra dice (I Juan 5:14) que Él ya me sanó, yo tengo que creerlo para que la sanidad se produzca en mi cuerpo físico. Dios nos oye cuando le pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad.
Tu oración tiene que estar saturada de fe por la Palabra de Dios. Orar en fe es orar basado en lo que establece la Palabra que Cristo hizo por ti, o sea, en un hecho que ya aconteció. Dios llama las cosas que no son como si fuesen (Romanos 4:17). Cuando oras en fe estás orando por algo que has creído que sucedió hace dos mil años atrás que fue hecho para ti. El profeta Isaías oró con fe: “Por cuya herida fuimos curados” (Isaías 53:5).
Isaías se acordó que Cristo fue inmolado antes de la fundación del mundo. Él no basó su oración en el futuro, es decir, cuando Cristo viniera a cumplir lo que ya había sido hecho. Fe es orar basado en la Palabra en cuanto a lo que ya, antes de la fundación del mundo, fue establecido y no en un hecho que esperamos ver en un futuro. Cuando yo digo: “Padre, Tu Palabra dice que por las heridas de Cristo yo fui sanado, prosperado y redimido de toda miseria y pobreza y declaro estas bendiciones en mi vida, estoy orando en fe de acuerdo a la Palabra.
Cuando oras en fe, estás declarando lo que es tuyo y lo estás trayendo a la existencia. Cuando declaras la Palabra estás materializando, poseyendo y trayendo a la existencia lo que no se ve; lo estás transportando del mundo espiritual al mundo físico y tangible. Dios quiere que todo creyente camine en esta dimensión de fe.
Cuando la Palabra comienza a funcionar en ti, recibes todos los beneficios de la redención; comienzas a madurar espiritualmente, apartándote del chisme, del pecado y de la contaminación. Dios comienza a bendecirte, a prosperarte y su paz satura tu vida. Dios comienza a apoderarse de ti. También debemos recordar que por la fe fue constituido el universo y todo lo que en él hay. Dios lo creó por la fe, confesando su Palabra.
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DEBORA A LAS NACIONES 2011
